La Cirugía Plasticá no resuelve todos los problemas, pero aumenta la autoestimación.
“La cirugía cosmética tiene por objeto dar un poco de seguridad para envejecer con gracia”, dice el Dr. Ivo Pitanguy. “Debe haber una comunicación perfecta entre el paciente y el médico”, opina el Dr. Alberto Sánchez. “La que busca en la operación una satisfacción personal, tendrá mejores resultados que la que cree que una nueva cara le devolverá al marido que perdió?…”, explica el Dr. Jorge Suárez.
Por Carmen Teresa Roiz
En un principio Dios creó al hombre…Y desde entonces, todos vivimos obsesionados tratando de mejorar la obra de nuestro creador…
Aunque muchos no lo admitan, consciente o incoscientemente, en mayor o menor grado, nos preocupa la opinión ajena, porque en todo ser humano hay un innato deseo de agradar a los demás.
Cuando estamos orgullosos de la imagen que proyectamos al mundo, no se genera un conflicto interior. Ni complejos ni traumas. El desbalance viene cuando por algún motivo dejamos de sentirnos satisfechos de nuestra apariencia. A veces, ese descontento parte de un juicio completamente subjetivo. En otras ocaciones, lo desata un acontecimiento completamente externo al individuo. En la mayoría de los casos, la causa principal es el rechazo ajeno.
Entonces vemos cómo el físico afecta el carácter, y el carácter afecta el físico. No hay una relación mas íntima que la del ser humano con su propio cuerpo. Pero al mismo tiempo somos un todo, y no puede separase la material del espíritu. Por eso, casi siempre, al mejorar la apariencia, mejora la personalidad.
Afortunadamente, cada día la mujer (y el hombre) cuentan con más y mejores recursos para embellecerse: dietas, ejecicios, maquillaje… Y cuando todo lo demás falla…la cirugía plástica.
Por ello, conscientes del interés que este tema siempre despierta, de los adelantos constantes de la medicina mmoderna, de la técnica, y especialmente de la actitud con que se miran hoy estas operaciones, VANIDADES CONTINENTAL entrevistó, con carácter exclusivo, a tres especialistas en la material: el brasilero Ivo Pitanguy, el cirujano plástico más famoso del mundo. El Dr. Alberto Sánchez, conocidísimo médico de Puerto Rico, quien dirige, con el Dr. Ismael Iglesias, el Sánchez and Iglesias Institute of Cosmetic Surgery de San Juan, y el Dr. Jorge Suárez Menéndez, cubano que divide su tiempo entre Ohio y la Florida, entrenado en el más antiguo y prestigioso programa de cirugía cosmética de los Estados Unidos en el Christ Hospital de Cincinnati, donde también estudió y fue el primer medico residente el Dr. Ivo Pitanguy.
Es importante estar seguro de la imagen que se proyecta.
Los médicos están de acuerdo al afirmar que la cirugía cosmética no trata de crear una persona nueva, sino de corregir defectos o rejuvenecer, sin alterar la estructura básica de la persona.
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El Dr. Ivo Pitanguy y el Dr. Jorge Suárez-Menéndez |
DR. IVO PITANGUY
Conversamos con el Dr. Pitanguy en Vale, Colorado, durante un congreso de cirugía cosmética, al que fue a dar una serie de conferencias.
En la galería de sus pacientes figuran Rosalyn Carter, Gina Lollobrigida, Farah Diba, Ursula Andress, Marisa Berenson, Ira de Furstenberg…Sin embargo, él se niega a decir una sola palabra sobre las personas que ha operado. Eso hay que averiguarlo po terceros…Pero últimamente, la famosa clínica de cirugía plástica que dirige en la Rua Mariana en el barrio de Botafogo en Río de Janeiro, Brasil, ha estado llena de celebridades.
“La fama”, él explica, “hace que las personas tengan expectativas que yo no puedo resolver. Estoy sujeto a las limitaciones del propio cuerpo humano y de la ciencia. No soy un artista”, afirma. Pero apesar de sus declaraciones nadie controla el aura de celebridad que lo rodea. Y después de hablar ante un anfiteatro repleto de médicos, fue abordado como si fuera un galán de cine por hombres y mujeres ansiosos y con los brazos extendidos que se disputaban un autografo suyo.
Al hablar de su éxito, Pitanguy rechaza lo que él llama estereotipos creados en torno a las operaciones que practica. “No existe la nariz Pitanguy. Incluso eso reduciría las operaciones a lo que tienen de exclusivamente técnicas. La nariz es el sostén del rostro. Lo que le da armonia”, agrega el doctor.
“No sigo un modelo clásico como el griego. La nariz griega comienza en la frente, no tiene lo que llamamos el ángulo glabelar (que la separa de la frente) fundamental para hacer de la nariz un elemento de union del mismo rostro. He operado judíos, árabes, negros…Lo que hago en esos casos es suavizar las características raciales sin suprimirlas”, sigue explicando.
“La convivencia con el paciente, y la observación de cada caso es lo que determina el trabajo a realizar. La memoria va más lejos que el intelecto”, dice parafraseando a Proust, uno de sus autores favoritos. Esta memoria a la que se refiere esta archivada cuidadosamente en la biblioteca de la clinica donde estan registradas casi 300 técnicas,marcas exclusiva del Dr. Pitanguy.
Entre sus innovaciones más famosas está una técnica para operar senos enormes, y para aumentar los pequeños mediante el uso de silicone. “El seno es el único organo sexual visible en la mujer”, explica para justificar tanta atención dedicada a estas operaciones. Y al mostrar numerosas diapositivas de senos como los de Jayne Mansfield, de los que ha llegado a eliminar hasta 750 gramos de grasa, explica que la mujer que tiene el busto tan grande llega a tener problemas serios de postura. Es un peso enorme el que tienen que cargar. “En estas situaciones es muy tenue la línea que divide la operación estética de la operación reparadora.
“Las operaciones más frecuentes son los liftings (estiramiento de la piel del rostro-rhitidectomia). Saber envejecer conservando su dignidad es una de las cosas más difíciles para el ser humano. Para el envejecimiento se combina una ecuación implacable: con el pasar de los años, el esqueleto se encoge y la piel crece. Vienen las arrugas, la flaccidez…Encuentro muy justo que una persona trate de evitar lo que la vejez le aportó a su aspecto, no sólo para rejuvenecer, sino para recobrar el bienestar perdido”, añadió. “Cada día la sociedad acepta más y más esa filosofía. Con la cirugía plástica la persona se siente más joven porque no se le ofrece una curación, sino un poco de seguridad en sí misma”, concluyó la explicación.
DR. ALBERTO SANCHEZ
“Es esculpiendo los tejidos humanos que el cirujano y el artista se encuentran”, comenzó explicando el Dr. Alberto Sánchez durante una breve vsita que hizo a Miami. El vino a participar en un congreso mundial de cirujanos plásticos que reunió a 220 doctores en el Cedars of Lebanon Hospital.
Y continuó diciendo: “Los resultados no se ven inmediatamente, hay que esperar de seis meses a un año que es cuando ya ha cedido completamente la inflamación que sigue a estas intervenciones”, dijo.
En cuanto a los diferentes tipos de operaciones que se pueden hacer, el Dr. Sánchez añade: “Los ojos se operan casi siempre al mismo tiempo que se hace el face lift (levantamiento del rostro). Hay excepciones, por ejemplo, personas que a los 20 años ya tienen bolsas en los ojos (claro éste es un caso hereditario). El grupo más grande está de los 40 a los 60 años, aunque he tenido señoras hasta de 80, pero estaban muy fuertes y saludables”.
En cuanto a los riesgos, él añade: “No son operaciones peligrosas, muchas se hacen con anestesia local pues no se intervienen las cavidades, sino se trata de cirugías que afectan los tejidos más superficiales, pero es posible que se presenten hermatomas o infecciones.
“Siempre trato de hacer que la persona se vea lo más natural posible. No me gusta estirar o variar la apariencia”, enfatizó.
Sobre las motivaciones que llevan a una persona a buscar la solución de sus problemas en la cirugía plástica el Dr. Sánchez también nos ofreció su valiosa opinión. “Hay siempre un deseo de verse más joven. Desgraciadamente, la gente ve la vejez como algo feo. Sólo Dios puede hacer a una persona bella o no. En mi opinión la belleza es interna. Pero a veces llega a una etapa en la que la persona ve que externamente ha envejecido. Sin embargo, se siente saludable y quiere someterse a un cambio. En esos casos, algunos de los problemas sicológicos que provocaron ese cambio mejoran, pero no todos. No podemos resolver desajustes síquicos.
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La cirugía reconstructiva es una de las ramas de la medicina en la que más adelantos se han hecho en los últimos años. El caso de esta niña es un ejemplo clásico. |
“Las señales de envejecimiento que primero aparecen en el rostro dependen de cada individuo. O sea, no hay una regla fija. Hay personas en las que primero se ven los párpados caídos. En otras, bolsas en los ojos, líneas en la cara, buches en la quijada, cuello arrugado. Al operar, yo enfatizo la corección del área más afectada. En la mujer llenita pongo más atención en el cuello, tratando de mejorar los músculos de esa parte para hacerlos firmes de nuevo”, dijo el Dr. Sánchez.
Al referirse al facelift (ritidectomía) él explica: “ Los cortes se hacen frente y detrás de la oreja. Las incisiones que se hacen detrás son las mayores. Es para evitar que las cicatricez sean aparentes. Toda cirugía deja marcas, y aunque en estos casos son mínimas, el proceso de cicatrización depende de la persona. Por ejemplo, la formación de queloides (carnosidades en las heridas) no tiene nada que ver con la pericis del cirujano, sino que depende de la condición de la piel de cada cual”, aclaró el doctor.
En cuanto a ciertos procesos asociados con las operaciones de la cara como los implantes él nos dijo: “Los implantes en los pómulos no están muy popularizados. En la barbilla son mucho más comunes, pero se debe aclarar que se trata de un implante de silicones y el cuerpo lo pudiera rechazar”, añadió.
Las operaciones del busto se resumen en: Aumentarlo, levantarlo o disminuirlo. “Cuando se va a reducir el busto, mientras mayor es éste, más grande va ser la herida. Esta es una operación que en su forma más simple se puede hacer con anestesia local, pero si implica un proceso más complicado hay que usar anestesia general y en ese caso se tiene que someter al paciente a un chequeo más riguroso. La incisión para la reducción del seno tiene la forma de una T invertida, aunque se esta tratando de hacerla en forma de L papa que las cicatrices queden oceultas debajo del busto.
DR. JORGE SUÁREZ-MENÉNDEZ
“El cirujano plástico no se hace...nace”, opina el Dr. Suárez-Menéndez. Y continuó: “Para mí, la cirugía cosmética se basa en un 75% de buen gusto y otro 25% de pericia técnica. La pericia se puede adquirir, estudiar...lo primero no”, añadió.
Al Dr. Suárez-Menéndez tambien lo entrevistamos en Vale, Colorado durante el congreso médico al que asistió. Actualmente, él forma parte del programa de cirugía cosmética del Christ Hospital de Cincinnati, Ohio, donde también se entrenó y fue el primer residente el Dr. Ivo Pitanguy.
El Dr. Jorge Suárez-Menéndez tambien insiste en la importancia de una comunicación muy estrecha entre el paciente y el médico. “El paciente debe decir qué es lo que espera de la operación. Por qué desea hacérsela, qué lo motiva a procurar un cambio. El médico a su vez, tiene el deber de explicarle lo que se puede y lo que no se puede hacer.
“La palabra clave es honestidad, de ambas partes. De esa manera ambos van a cooperar hacia el mismo objetivo, y a obtener el mejor resultado. Es siempre oportuno aclarar que la perfección no existe...Ni siquiera en cirugía plástica. Sin embargo, uno siempre trata de alcanzarla, de hacer lo mejor posible. La persona que va a operarse debe pensar que va mejorar su apariencia, que se van a corrgir ciertos defectos, pero debe estar consciente que la operación no le va a resolver todos sus problemas personales.
“Al paciente neurótico que viene pidiendo quiero tener una nariz así o esta cara y trae la foto de un artista... se le debe explicar que quizas la solución de sus problemas no está en la cirugía. La persona mentalmente saludable es la que quiere verse mejor, que desea un estímulo. No para satisfacer a nadie, sino para satisfacerse a sí mismo. La que así piensa representa al paciente ideal”, afirmó el Dr. Suárez-Menéndez.
“Por otra parte, también es cierto que casitodos atravesamos crisis de identidad en algún momento de nuestras vidas. Por ejemplo, los pacientes más jóvenes que se presentan son aquéllos que vienen a operarse las orejas (otoplastia) y la nariz. Lo que resulta es que a veces sienten que sus defectos físicos los hacen ser inhibidos, y se les llega a afectar la personalidad. Son casos en los que la cirugía los ayuda, no sólo a verse mejor, sino a funcionar mejor en sociedad. En ese grupo también podemos incluir a las chicas que se sienten acomplejadas por tener el busto demasiado grande o demasiado pequeño.
“Después delos 25 años generalmente, la mujer que se somete a una intervención de cirugía cosmética es la recién divorciada que desea comenzar una vida nueva. En la mayoría de los casos se operan el busto y el abdomen. La que tiene mas de 40, a veces, aunque casada, siente que ya no es atractiva para su marido y se hace un facelift, además de otras operaciones.
“Es curioso que en el grupo de los pacientes de más de 50 años es donde tenemos más hombres. Muchos son ejecutivos que tratan de mantener una imagen joven, porque están conscientes del mercado tan competitivo que existe, y la importancia de la juventud en el mundo de los negocios de hoy. Después de los 60, el grupo quizás no sea tan numeroso. Son personas de dinero que buscan la juventud. Algunos aceptan envejecer, otros tratan de compensar lo perdido...Pero siempre es positivo hacer algo por uno mismo, algo que nos haga sentirnos mejor. Así actúan las personas positivas. Las negativas se sumergen en la autodestruccion”, dijo el Dr. Suárez-Menéndez con convicción.
Hay otra fase de la cirugía cosmética que tiene por objeto reparar órganos mutilados, defectos fisicos de nacimiento. En ese grupo está la reconstrucción del seno despues de una mastectomía. Sobre esto nos dice el Dr. Suárez-Menéndez: “Esta operación a veces se hace al mismo tiempo que la propia mastectomía. Se puede usar el mismo pezón, pero otras veces se hace uno tomando el tejido de la propia mujer cercano a la región púbica, donde la coloración de la piel es parecida. En otros casos se pueden colocar implantes, y en muchas ocasiones el nuevo seno es casi igual a uno normal. De esa forma, la mujer que se ha sometido a este tipo de operación se va a sentir sicológicamente mucho mejor”, nos explicó él dando por terminada esta interesante entrevista exclusiva. |